Dirección: Frank Henenlotter
Guión: Frank Henenlotter
País: EE.UU.
Año: 1988
Duración: 84 min.
Reparto: Rick Hearst, Gordon MacDonald, Jennifer Lowry, Theo Barnes, Lucille Sain-Peter
Aylmer es un engendro carismático; con aspecto entre pepino y cabeza fálica dentada, su afición es comer cerebros humanos sin discreción, ofrecidos por un hospitalario humano a quien a cambio, dará el mejor viaje psicotrónico que pueda imaginar. Bryan es nuestro junky facilitador, y su vida como la de cualquier joven americano con ganas de reproducirse. Sin embargo, gracias a las cortesías de Aylmer (nuestro Elmer), la veremos venir abajo
Sin duda, una de las más divertidas versiones cinematográficas sobre drogas y malos hábitos sobre la mesa. Hecha con un presupuesto apretadísimo, compensa los efectos y sus desvaríos técnicos, con humor negro y sinceridad. Su director Henenlotter, también conocido por otras cuentas cinematográficas como Basket Case y Frankenhooker, nos trae un mensaje claro sobre las consecuencias del consumo y lo provechosas que resultan las relaciones interespecie.
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